(continuación del post anterior de 25 de julio)
5. Aún en nuestro días, muchas mujeres que llegan a posiciones de alta dirección lo hacen sorteando tremendas dificultades y gran sacrificio personal.
Mientras tanto las jóvenes intentan llegar a la cima con una situación familiar normal con marido e hijos. Sus mentoras que, como la mayoría de mujeres, tienden a valorar el éxito tanto frente a su vida profesional como a la personal, sufren un doloroso agravio comparativo.
6. La tendencia natural de la mujer – aún en ausencia de conflictos – a invertir más energía emocional que los hombres en sus relaciones, es una barrera a aceptar roles de mentoría en la organización.
Sólo el 10% de las mujeres directivas o profesionales tienen una actividad significativa en mentoría comparadas con el 25/30% de los hombres.
El futuro del desarrollo de la mujer como mentora, está en las empresas pequeñas fundadas y dirigidas por mujeres.
La incorporación plena de la mujer en los trabajos de mentorizar a los jóvenes es uno de los retos más importantes a los que se enfrentan a las empresas en el nuevo modelo económico en el que hemos entrado.
6/08/11 at 2:48
Este concepto de mentor, dentro de la empresa, me es novedoso, pues no lo habìa escuchado.
La inducciòn del nuevo empleado es una herramienta que si me es familiar y la capacitaciòn directa del trabajador , cuando se incorpora a la empresa tambien. Si fuera posible me gustarìa tu ampliaciòn al concepto de mentorizar. Gracias anticipadas.
6/08/11 at 10:47
Hola.
Gracias por tu comentario. Te haré llegar una breve nota tecnica con desarrollo y practica del concepto a tu mail. Ahora estoy fuera de vacaciones. Un saludo